Vivimos en un mundo de sonidos. Sonidos que se oyen y otros que no. Sonidos musicales y caóticos. Sonidos familiares y extraños. Sonidos agradables y sonidos inquietantes. Sonidos que destrozan y sonidos que curan.
Desde la gestación estamos rodeados de sonidos: los latidos de la madre y su respiración.
El sonido nos afecta por el principio de resonancia, por el cual una vibración más intensa y armónica contagia a otra más débil y desarmónica. El sonido de los cuencos tibetanos equilibran los planos físico, mental y emocional. Actúan despejando la mente, destrabando bloqueos emocionales.
Son sonidos puros, intensos y guardan un misterio particular.
Es una experiencia para ser vivida.
Es una experiencia para ser vivida.
Todo en la naturaleza esta en constante movimiento, todo vibra. La naturaleza tiende a vibrar en consecuencia (o a buscarla si es que por alguna circunstancia se perdió) desde sus conformaciones más pequeñas e invisibles a nuestros ojos, hasta las más expansivas, como el sistema cósmico e interplanetario. Las vibraciones que producen el sonido, representan una energía que se encuentra en toda la naturaleza.
La terapia con Cuencos es una terapia vibracional. Los Cuencos nos ayudan a aquietar la mente, nos reordenan y nos conectan con nuestra música interna. Nos ayudan a liberar bloqueos para recuperar la armonía de nuestra consonancia interna.
"Si el ritmo y la vibración están en armonía,
aflora el estado de salud"
Cuando nuestro eje interno se desequilibra, se produce un desbalance que si no se reordena puede llegar a desencadenar en una enfermedad.
"En la terapia de sonido,
los armónicos nos realinean en todos los niveles"
Cada persona es diferente, por lo que el sonido produce efectos y sensaciones distintas en cada una.
El sonido ingresa en nuestro cuerpo, lo reconoce y comienza a vibrar en la misma frecuencia restableciendo así su equilibro natural, alineando todos nuestros centros de energía. La vibración armónica produce orden por el efecto de resonancia.
Al modificar nuestra vibración podemos cambiar nuestra salud recuperando el estado equilibrio interno y externo.
El sonido ingresa en nuestro cuerpo, lo reconoce y comienza a vibrar en la misma frecuencia restableciendo así su equilibro natural, alineando todos nuestros centros de energía. La vibración armónica produce orden por el efecto de resonancia.
Al modificar nuestra vibración podemos cambiar nuestra salud recuperando el estado equilibrio interno y externo.
"Existe un espacio de paz y bienestar en nosotros, y los Cuencos nos ayudan a entrar en contacto con nuestra verdadera esencia"
Beneficios del sonido de los cuencos:
Los cuencos armonizan principalmente el sistema nervioso y el cardíaco, elevan las defensas del organismo predisponiendo a estados profundamente introspectivos, beneficiosos para la salud, reduciendo la segregación de hormonas que producen stress y elevando las que producen bienestar a todo nivel (endorfinas).
·Limpia el entorno habitacional
·Ayuda a eliminar las contracturas posturales
·Alivia la sinusitis y los dolores de cabeza
·Genera un suave masaje y una armonización celular
·Fortalece el sistema inmunológico
·Restablece el equilibrio del sistema endócrino mediante la vibración de la hipófisis
·Aumenta la energía por medio de la estimulacion del líquido cefaloraquídeo
·Agudiza la visión (fisica, mental y espiritual)
·Equilibra los hemisferios cerebrales
·Equilibra y limpia los centros energéticos (y los órganos y glándulas correspondientes)
·Alivia el stress y la ansiedad
·Logra una relajación profunda
·Mejora la concentración y la creatividad
·Estimula la actividad de las ondas alfa o de meditación profunda
·Facilita el acceso a la intuición y a la consciencia superior